Algunas veces hemos escuchado hablar de las ludotecas, pero no siempre tenemos demasiado claro que son y qué es lo que nuestros/as hijos/as harán en ellas. Vamos a hablar un poco sobre estos espacios para conocer un poquito más lo que se puede hacer en estos lugares de encuentro y juego.
Las ludotecas son centros o espacios en los que a través del juego como herramienta educativa y de formación, se estimula el desarrollo mental, psicomotor, efectivo, sensorial, con una finalidad lúdica, socioeducativa, cívica, cultural, coeducativa, …
Generalmente están destinadas a niños aproximadamente entre 3 y 12 años, aunque las edades varían en función de las ludotecas, y tienen como objetivo principal garantizar el Derecho del niño/a al juego.
En ellas, se proporciona un espacio adecuado a las edades de sus destinatarios, con los recursos necesarios: pueden ser juguetes, juegos y otros elementos lúdicos que se ponen a disposición de los niños/as.
La importancia de tener un equipo profesional especializado
Las ludotecas cuentan con un equipo de profesionales especializados (ludotecarios/as), responsables de orientar a los niñ@s sobre los distintos juegos y juguetes, deben tener la capacidad de divertirse con ellos, así como crear un ambiente de juego y respeto donde todos sientan la libertad de experimentar.
Las funciones principales del equipo profesional podrían definirse en:
- Elaborar y desarrollar un programa socioeducativo que fomente el desarrollo integral a partir de una actividad lúdica y creativa.
- Orientar a los niñ@s sobre el material lúdico según sus gustos, habilidades y posibilidades.
- Promover el juego en grupo para estimular la solidaridad y la participación.
- Facilitar, en la medida del posible, los recursos lúdicos adecuados a las personas usuarias con disminuciones físicas, psíquicas y sensoriales.
Se pueden encontrar ludotecas temporales o permanentes, de carácter público o privado, que sean independientes o integradas en un edificio ( Casas de Cultura, Centros Comerciales, empresas, escuelas,…) pero en todas ellas encontramos al niño/a como protagonista y estará presente el placer del juego por juego. ¡Juguemos!.